Seder de Pesaj por la tarde

Brno, República Checa

Luego de 30 años de letargo, la comunidad de Brno, en la República Checa, vuelve a la vida llena de dilemas halájicos.
Queridos hermanos y hermanas, hoy es un importante día no sólo para nuestra comunidad sino para todos los judíos de Moravia. Estamos por inaugurar la nueva mikve de nuestra comunidad, la primera mikve que se construye, luego de la shoá, en la República Checa. Invertimos mucho dinero en la misma, dado que ésta, es la prueba de que Stalin y el comunismo, y Hitler y los Nazis se equivocaron, y no lograron eliminar al pueblo judío. Esta mikve será el símbolo y la esperanza de las próximas generaciones, de que a pesar de la shoá el pueblo judío aún existe.
(Discurso del Sr. Pavel Frid, presidente de la comunidad de Brno, en el acto de inauguración de la mikve en Rosh Jodesh Jeshván 5767).

Todos conocen el gran pasado de la judería de Praga gracias al Maharal y a otras importantes figuras. Pero muy pocos han oído de Brno, la capital de la zona de Moravia en la República Checa.

La comunidad judía de dicha ciudad es de las más antiguas de Europa, y sus raíces provienen de comienzos del siglo XIII. Ya en 1243, el año en que Brno fue oficialmente reconocida como ciudad, había allí judíos; una de las 5 puertas que fueron creadas en ese mismo año se llama “la puerta de los judíos”.

Antes de la shoá, vivían en Brno más de 14.000 judíos, los cuales asistían a 7 sinagogas. Entre los años 1941-1942 los mismos fueron deportados al ghetto de Terezín y de allí a los campos de exterminio. Luego de la guerra, retornaron a Brno solamente cerca de 1000 judíos. Cuando los comunistas tomaron el gobierno en el año 1948, muchos judíos dejaron el país, y 20 años después, cuando los rusos conquistaron Checoslovaquia, parte de los restantes emigraron a otros países de Europa. Hasta la revolución de 1989, era peligroso identificarse como judío y los mismos se reunían tan solo en los actos de Iom Hashoá, y vivían alrededor de la historia y la cultura judía.

Luego de la liberación del comunismo, surgió la posibilidad de revivir la vida judía y así también se abrió el único Beit Kneset que sobrevivió la guerra. Hoy en día, los miembros de la comunidad son alrededor de 300 judíos habitantes de Brno, muchos de ellos ya mayores. Trescientos miembros más viven en las ciudades cercanas a Olomouc y Ostrava.
En las paredes externas del Beit Kneset, el cual fue construido en 1936, no hay ningún símbolo judío. En el mismo, tienen lugar plegarias de shabat y festividades, sin embargo como en toda comunidad en que los matrimonios mixtos son parte de la historia, hay varias veces cerca de 30 feligreses, hombres y mujeres, pero no hay minián…

El Rabino se enfrenta a la situación

La shoá y el comunismo no fueron los primeros golpes que sufrió la comunidad judía de Moravia. En el año 1455, cuarenta años antes de la expulsión de España, los judíos fueron expulsados de la ciudad, y entre ellos los judíos de Berno y Olomouc, hacia los pueblos. Se formó una nueva e interesante situación donde las más importantes comunidades estaban en los pueblos y no en las grandes ciudades. Tan sólo en 1870, durante el gobierno de José II en el imperio austro-húngaro, los judíos de la zona recibieron igualdad de derechos.

En el área de Moravia vivían grandes sabios de diferentes épocas: el Shaj (Siftei Cohén), Rabi Ionatan Aivishitz, el Rabino Shimshon Rafael Hirsh y también el Maharal de Praga, quien durante la mayor parte de su vida fue rabino de Nikolsburgo, cercana a Brno y allí escribió la mayor parte de sus libros.

Hasta el año 1970 el Rabino de la comunidad era el Rabino Richard Feder z”l, quien actuaba bajo el gobierno comunista. Y después de él, no hubo rabino en la comunidad hasta que llegó el Rabino Moshé Koler en el año 2003. Luego de un largo período sin rabino, se presentaron muchas preguntas halájicas sin duda alguna. El nuevo rabino debía enfrentarse a interesantes situaciones la cual demostraba el alejamiento de la tradición por un lado, y el deseo de preservar la herencia judía por el otro.

Durante su primer año, cuando pidió saber a qué hora hacen el seder de pesaj, le contestó que a las 17hs… a pesar de que el atardecer y la salida de las estrellas es sólo después de las 20hs. El presidente le explicó que muchos de los asistentes son personas ancianas, a las cuales la salud no les permite esperar hasta tan tarde sin comida. Y así debía el rabino enfrentarse con la preparación del seder durante el día. ¿Cómo se hace kidush durante el día? ¿Se cumple la obligación de las 4 copas de día? ¿Se puede recitar el maguid de la hagadá durante el día? ¿Acaso el Rabino y su familia deben realizar todas las mitzvot de pesaj nuevamente después de la salida de las estrellas?

Polvo y cenizas

El cementerio judío local parece un bello y floreciente jardín, y la comunidad se encuentra muy orgullosa del cuidado del mismo. Las primeras tumbas son de 1854. Sin embargo, también aquí se despiertan varias y originales preguntas halájicas.

Hace unos meses falleció uno de los judíos locales, quien pidió que antes de que quemen su cuerpo y lo pongan en un frasco en un cementerio no judío, le hagan el lavado ritual judío de acuerdo a la halajá, digan esped (palabras en honor al fallecido), kadish, y algunos salmos en la casa fúnebre judía. La costumbre de quemar los cuerpos en la República Checa existe hace ya varias generaciones. Es la forma natural de ser enterrado y tampoco los judíos no ven nada malo en esto. En mi visita al cementerio, vi una zona apartada de las demás, y me fue explicado que se trata de personas que eligieron ser quemadas pero no estaban dispuestas a ser enterradas en un cementerio no judío…

“La costumbre del lugar” en el cementerio de Brno, es a mi forma de ver algo único en el mundo y muy “original”. Durante los años del gobierno comunista, muchos judíos se casaron con mujeres no judías. A veces el amor fue más fuerte que la halajá, y dichas parejas pidieron ser enterradas en forma conjunta en el cementerio judío. ¿Pero cómo puede la mujer no judía ser enterrada al lado de su marido judío?

A dicho problema se le encontró una original solución: luego de que el esposo falleció el mismo fue enterrado de forma judía. Luego de que la mujer falleció, su cuerpo fue quemado y la vasija con las cenizas fue puesta en una caja a los pies de la lápida de su esposo… así los dos esposos fueron enterrados en forma conjunta. La explicación para dicha costumbre es que ¡es inconcebible que un judío sea enterrado al lado de un goy en un cementerio judío!, pero luego de quemar el cuerpo, es tan sólo polvo.

Tevilá en el jacuzzi

Durante la construcción de la nueva mikve de la comunidad, recibí una llamada telefónica del Rabino, el cual me preguntó si es posible construir una mikve que es también jacuzzi (en el mismo pozo). Cuándo le pregunté el porqué de su pregunta, me dijo que la comunidad no comprende la importancia de la construcción de la mikve, y está dispuesta a ayudar tan solo si servirá también como jacuzzi, como parte de un SPA. Finalmente, la comunidad aceptó la opinión del rabino, y construyó una mikve clásica sin jacuzzi, donde al lado hay un sauna, jacuzzi y un SPA. La inauguración de la mikve, la cual fue construida con la ayuda de “La Comisión de Rabinos de Europa”, fue un emocionante evento, del cual participaron una gran parte de los miembros de la comunidad.

El Rabino de la comunidad, el Rab Moshé Koler, intenta renovar la vida judía de la comunidad de Brno de la misma forma en que explica la profecía de los huesos secos de Yejezkel: primero, intenta construir la base material de la comunidad: Beit Kneset, Mikve, comer casher donde haya comidas todos los días para los miembros de la comunidad y un lugar para seminarios y actividades sabáticas. Luego, el Rabino desea que la segunda parte de la profecía se haga realidad: reunir a todos los judíos y sus descendientes de la zona de Brno y Moravia, a actividades judías y shabatot compartidos. Y así, con la ayuda de Di-s, se cumplirá: “y les daré mi espíritu y vivirán…”.

A pesar de que la comunidad cuenta con sólo 300 judíos, los cuales en su mayoría son personas mayores, y es posible de que la mikve no tenga uso diario, semanal o incluso mensual, la misma tiene un significado especial en dicho lugar. Se transforma en el símbolo de la existencia judía “a pesar de todo lo sucedido”, representando el triunfo del pueblo de Israel sobre sus enemigos. De esta forma, incluso si las mujeres no realizan tevilá habitualmente, la mikve se encuentra en “uso” en todo momento. La misma, no deja de ser el símbolo de la esperanza ni siquiera un instante.

Rabino Eliahu Birnbaum